viernes, 27 de mayo de 2011

cigarrillo en tu boca...

Ansioso, después de un largo día sin fumar,
me colocaste dulcemente en tu boca,
toqué tus labios y di el primer paso para volverme loca,
me encendiste con tus manos,
me saboreaste en mil orgasmos,
disfrutaste de mi sabor amargo
y del humeante latir de mi corazón
ardiendo lentamente en tu aliento,
me consumiste hasta quemarte tú también,
me tiraste al suelo, y allí, despojada de mi poca dignidad,
me pisoteaste, te diste media vuelta y te largaste,
pero…querido…no te diste cuenta que del todo no me apagué,
seguí consumiéndome sola, haciendo cenizas de lo que antes fue un dulce caramelo,
despacito, ahogándome en mi propio humo, maldiciendo tu veneno.
Lo que nadie se esperaba, es que, como mi propio nombre indica, me reencarné, esta vez en un puro habano,
uno tan elegante, dulce y caro que nunca podrás permitirte ponerme de nuevo en tus manos…

Tarni

No hay comentarios:

Publicar un comentario